PART 21

 

[29.46] No discutáis sino con buenos modales con la gente de la Escritura, excepto con los que hayan obrado impíamente. Y decid: «Creemos en lo que se nos ha revelado a nosotros y en lo que se os ha revelado a vosotros. Nuestro Dios y vuestro Dios es Uno. Y nos sometemos a él».

[29.47] Y, así, te hemos revelado la Escritura. Aquéllos a quienes revelamos la Escritura creen en ella. Entre éstos hay algunos que creen en ella. Nadie rechaza Nuestros signos sino los infieles.

[29.48] Tú no leías, antes de recibirla, ninguna Escritura, ni copiabas ninguna con tu diestra. Los falsarios, si no, habrían sospechado...

[29.49] Antes bien, es un conjunto de aleyas claras en los pechos de quienes han recibido la Ciencia. No niegan Nuestros signos sino los impíos.

[29.50] Dicen: «¿Por qué no se le han revelado signos procedentes de su Señor?» Di: «Sólo Alá dispone de los signos. Yo soy solamente un monitor que habla claro».

[29.51] ¿Es que no les basta que te hayamos revelado la Escritura que se les recita? Hay en ello una misericordia y una amonestación para gente que cree.

[29.52] Di: «¡Alá basta como testigo entre yo y vosotros! Conoce lo que está en los cielos y en la tierra. Quienes crean en lo falso y no crean en Alá, ésos serán los que pierdan».

[29.53] Y te piden que adelantes el castigo. Si no fuera porque ha sido prefijado, les habría ya alcanzado. Les vendrá, en verdad, de repente, sin presentirlo.

[29.54] Te piden que adelantes el castigo. Sí, la gehena cercará a los infieles.

[29.55] El día que el castigo les cubra de pies a cabeza y diga: «¡Gustad el fruto de vuestras obras!»

[29.56] ¡Siervos creyentes! ¡Mi tierra es vasta! ¡Servidme, pues, a Mí solo!

[29.57] Cada uno gustará la muerte. Luego, seréis devueltos a Nosotros.

[29.58] A quienes hayan creído y hecho el bien hemos de alojarles en el Jardín, eternamente, en cámaras altas, a cuyos pies fluyen arroyos. ¡Qué grata es la recompensa de los que obran bien,

[29.59] que tienen paciencia y confían en su Señor!

[29.60] ¡Cuántas bestias hay que no pueden proveerse del sustento! Alá se encarga de él y del vuestro. Él es Quien todo lo oye, Quien todo lo sabe.

[29.61] Si les preguntas: «¿Quién ha creado los cielos y la tierra y sujetado el sol y la luna?», seguro que dicen: «¡Alá!» ¡Cómo pueden, pues, ser tan desviados!

[29.62] Alá dispensa el sustento a quien Él quiere de Sus siervos: a unos con largueza, a otros con mesura. Alá es omnisciente.

[29.63] Si les preguntas: «¿Quién hace bajar agua del cielo, vivificando con ella la tierra después de muerta?», seguro que dicen: «¡Alá!» Di: «¡Alabado sea Alá!» No, la mayoría no comprenden.

[29.64] Esta vida de acá no es sino distracción y juego, pero la Morada Postrera, ésa sí que es la Vida. Si supieran...

[29.65] Cuando se embarcan, invocan a Alá rindiéndole culto sincero. Pero, en cuanto les salva, llevándoles a tierra firme, al punto Le asocian otros dioses,

[29.66] para terminar negando lo que les hemos dado. ¡Que gocen por breve tiempo! ¡Van a ver...!

[29.67] ¿No ven que hemos hecho un territorio sagrado y seguro, mientras, alrededor de ellos, secuestran a la gente? ¿Creen, pues, en lo falso y no creerán en la gracia de Alá?

[29.68] ¿Hay alguien que sea más impío que quien inventa una mentira contra Alá o que, cuando viene a él la Verdad, la desmiente? ¿No hay en la gehena una morada para los infieles?

[29.69] A quienes hayan combatido por Nosotros ¡hemos de guiarles por Nuestros caminos! ¡Alá está, en verdad, con quienes hacen el bien!

 

AR RUUM

¡En el nombre de Alá, el Compasivo, el Misericordioso!

[30.1] 'lm.

[30.2] Los bizantinos han sido vencidos

[30.3] en los confines del país. Pero, después de su derrota, vencerán

[30.4] dentro de varios años. Todo está en manos de Alá, tanto el pasado como el futuro. Ese día, los creyentes se regocijarán

[30.5] del auxilio de Alá. Auxilia a quien Él quiere. Es el Poderoso, el Misericordioso.

[30.6] ¡Promesa de Alá! Alá no falta a Su promesa. Pero la mayoría de los hombres no saben.

[30.7] Conocen lo externo de la vida de acá, pero no se preocupan por la otra vida.

[30.8] ¿Es que no reflexionan en su interior? Alá no ha creado los cielos, la tierra y lo que entre ellos está sino con un fin y por un período determinado. Pero muchos hombres se niegan, sí, a creer en el encuentro de su Señor.

[30.9] ¿No han ido por la tierra y mirado cómo terminaron sus antecesores? Eran más poderosos, araban la tierra y la poblaban más que ellos. Sus enviados vinieron a ellos con las pruebas claras. No fue Alá quien fue injusto con ellos, sino que ellos lo fueron consigo mismos.

[30.10] Y el fin de los que obraron mal fue el peor, porque desmintieron los signos de Alá y se burlaron de ellos.

[30.11] Alá inicia la creación y luego la repite, después de lo cual seréis devueltos a Él.

[30.12] Cuando suene la Hora, los pecadores serán presa de la desesperación.

[30.13] Sus asociados no intercederán por ellos y éstos renegarán de aquéllos.

[30.14] El día que suene la Hora se dividirán:

[30.15] quienes hayan creído y obrado bien, serán regocijados en un prado;

[30.16] pero quienes no hayan creído y hayan desmentido Nuestros signos y la existencia de la otra vida serán entregados al castigo.

[30.17] ¡Gloria a Alá tarde y mañana!

[30.18] ¡Alabado sea en los cielos y en la tierra, por la tarde y al mediodía!

[30.19] Saca al vivo del muerto, al muerto del vivo. Vivifica la tierra después de muerta. Así es como se os sacará.

[30.20] Y entre Sus signos está el haberos creado de tierra. Luego, hechos hombres, os diseminasteis...

[30.21] Y entre Sus signos está el haberos creado esposas nacidas entre vosotros, para que os sirvan de quietud, y el haber suscitado entre vosotros el afecto y la bondad. Ciertamente, hay en ellos signos para gente que reflexiona.

[30.22] Y entre Sus signos está la creación de los cielos y de la tierra, la diversidad de vuestras lenguas y de vuestros colores. Ciertamente hay en ello signos para los que saben.

[30.23] Y entre Sus signos está vuestro sueño, de noche o de día, vuestra solicitud en recibir Su favor. Ciertamente, hay en ello signos para gente que oye.

[30.24] Y entre Sus signos está el haceros ver el relámpago, motivo de temor y de anhelo, y el hacer bajar agua del cielo, vivificando con ella la tierra después de muerta. Ciertamente, hay en ello signos para gente que razona.

[30.25] Y entre sus Signos está el que los cielos y la tierra se sostengan por una orden Suya. Al final, apenas Él os llame de la tierra, saldréis inmediatamente.

[30.26] Suyos son quienes están en los cielos y en la tierra. Todos Le obedecen.

[30.27] Es Él Quien inicia la creación y, luego, la repite. Es cosa fácil para Él. Representa el ideal supremo en los cielos y en la tierra. Es el Poderoso, el Sabio.

[30.28] Os propone una parábola tomada de vuestro mismo ambiente: ¿Hay entre vuestros esclavos quienes participen del mismo sustento de que os hemos proveído, de modo que podáis equipararos en ello con ellos y les temáis tanto cuanto os teméis unos a otros? Así explicamos detalladamente los signos a gente que razona.

[30.29] Los impíos, al contrario, siguen sus pasiones sin conocimiento. ¿Quién podrá dirigir a aquéllos a quienes Alá ha extraviado? No tendrán quien les auxilie.

[30.30] ¡Profesa la Religión como hanif, según la naturaleza primigenia que Alá ha puesto en los hombres! No cabe alteración en la creación de Alá. Ésa es la religión verdadera. Pero la mayoría de los hombres no saben.

[30.31] ...volviéndoos a Él arrepentidos. ¡Temedle, haced la azalá y no seáis de los asociadores,

[30.32] de los que escinden su religión en sectas, contento cada grupo con lo suyo!

[30.33] Cuando los hombres sufren una desgracia, invocan a su Señor, volviéndose a Él arrepentidos. Luego, cuando les ha hecho gustar una misericordia venida de Él, algunos de ellos asocian otros dioses a su Señor,

[30.34] para terminar negando lo que les hemos dado. ¡Gozad, pues, brevemente! ¡Vais a ver...!

[30.35] ¿Acaso les hemos conferido una autoridad que hable de lo que ellos Le asocian?

[30.36] Cuando hacemos gustar a los hombres una misericordia, se regocijan de ella. Pero, si les sucede un mal como castigo a sus obras, ahí les tenéis desesperados.

[30.37] ¿Es que no ven que Alá dispensa el sustento a quienes Él quiere: a unos con largueza, a otros con mesura? Ciertamente, hay en ello signos para gente que cree.

[30.38] Da lo que es de derecho al pariente, al pobre y al viajero. Es lo mejor para quienes desean agradar a Alá. Esos son los que prosperarán.

[30.39] Lo que prestáis con usura para que os produzca a costa de la hacienda ajena no os produce ante Alá. En cambio, lo que dais de azaque por deseo de agradar a Alá... Ésos son los que recibirán el doble.

[30.40] Alá es Quien os ha creado y, luego proveído del sustento, Quien os hará morir y, luego, volveros a la vida. ¿Hay alguno de vuestros asociados que sea capaz de hacer algo de eso? ¡Gloria a Él! ¡Está por encima de lo que Le asocian!

[30.41] Ha aparecido la corrupción en la tierra y en el mar como consecuencia de las acciones de los hombres, para hacerles gustar parte de lo que han hecho. Quizás, así, se conviertan.

[30.42] Di: «¡Id por la tierra y mirad cómo terminaron sus antecesores: fueron, en su mayoría, asociadores!»

[30.43] Profesa la religión verdadera antes de que llegue un día que Alá no evitará. Ese día serán separados:

[30.44] quienes no hayan creído sufrirán las consecuencias de su incredulidad, pero quienes hayan obrado bien se habrán preparado un lecho.

[30.45] Para retribuir con Su favor a los que hayan creído y obrado bien. Él no ama a los infieles.

[30.46] Entre Sus signos, está el envío de los vientos como nuncios de la buena nueva, para daros a gustar de Su misericordia, para que naveguen las naves siguiendo Sus órdenes y para que busquéis Su favor. Y quizás, así, seáis agradecidos.

[30.47] Antes de ti, hemos mandado enviados a su pueblo. Les aportaron las pruebas claras. Nos vengamos de los que pecaron, era deber Nuestro auxiliar a los creyentes.

[30.48] Alá es Quien envía los vientos y éstos levantan nubes. Y Él las extiende como quiere por el cielo, las fragmenta y ves que sale de dentro de ellas el chaparrón. Cuando favorece con éste a los siervos que Él quiere, he aquí que éstos se regocijan,

[30.49] mientras que, antes de haberles sido enviado desde arriba, habían sido presa de la desesperación.

[30.50] ¡Y mira las huellas de la misericordia de Alá, cómo vivifica la tierra después de muerta! Tal es, en verdad, el Vivificador de los muertos. Es omnipotente.

[30.51] Y si enviamos un viento y ven que amarillea, se obstinan, no obstante, en su incredulidad.

[30.52] Tú no puedes hacer que los muertos oigan ni que los sordos oigan el llamamiento, si vuelven la espalda.

[30.53] Ni puedes dirigir a los ciegos, sacándoles de su extravío. Tú no puedes hacer que oigan sino quienes creen en Nuestros signos y están sometidos a Nosotros.

[30.54] Alá es Quien os creó débiles; luego, después de ser débiles, os fortaleció luego, después de fortaleceros, os debilitó y os encaneció. Crea lo que Él quiere. Es el Omnisciente, el Omnipotente.

[30.55] El día que llegue la Hora, jurarán los pecadores que no han permanecido sino una hora. Así estaban de desviados...

[30.56] Quienes habían recibido la Ciencia y la fe dirán: «Habéis permanecido el tiempo previsto en la Escritura de Alá: hasta el día de la Resurrección, y hoy es el día de la Resurrección. Pero no sabíais...»

[30.57] Ese día, no les servirán de nada a los impíos sus excusas y no serán agraciados.

[30.58] En este Corán hemos dado a los hombres toda clase de ejemplos. Si les vienes con una aleya, seguro que dicen los infieles: «¡No sois más que unos falsarios!»

[30.59] Así es como sella Alá los corazones de los que no saben.

[30.60] ¡Ten, pues, paciencia! ¡Lo que Alá promete es verdad! ¡Que no te encuentren ligero quienes no están convencidos!

 

LUQMAN

¡En el nombre de Alá, el Compasivo, el Misericordioso!

[31.1] 'lm.

[31.2] Éstas son las aleyas de la Escritura sabia,

[31.3] como dirección y misericordia para quienes hacen el bien.

[31.4] que hacen la azalá, dan el azaque y están convencidos de la otra vida.

[31.5] Esos tales están dirigidos por su Señor, ésos son los que prosperarán.

[31.6] Hay entre los hombres quien compra historietas divertidas para, sin conocimiento, extraviar a otros del camino de Alá y para tomarlo a burla. Quienes tal hagan tendrán un castigo humillante.

[31.7] Cuando se le recitan Nuestras aleyas, se aleja altivamente, como si no las hubiera oído, como si hubiera estado sordo. ¡Anúnciale un castigo doloroso!

[31.8] Quienes, en cambio, hayan creído y obrado bien tendrán los jardines de la Delicia.

[31.9] en los que estarán eternamente. ¡Promesa de Alá verdad! Él es el Poderoso, el Sabio.

[31.10] Ha creado los cielos sin pilares visibles. Ha fijado en la tierra las montañas para que ella y vosotros no vaciléis. Ha diseminado por ella toda clase de bestias. Hemos hecho bajar agua del cielo y crecer en ella toda especie generosa.

[31.11] Ésta es la creación de Alá. ¡Mostradme, pues, qué han creado los otros dioses que hay fuera de Él! Sí, los impíos están evidentemente extraviados.

[31.12] Dimos a Luqmán la sabiduría: «¡Sé agradecido con Alá! Quien es agradecido lo es, en realidad, en provecho propio. Quien es desagradecido... Alá Se basta a Sí mismo, es digno de alabanza».

[31.13] Y cuando Luqmán amonestó a su hijo, diciéndole: «¡Hijito! ¡No asocies a Alá otros dioses, que la asociación es una impiedad enorme!».

[31.14] Hemos ordenado al hombre con respecto a sus padres -su madre le llevó sufriendo pena tras pena y le destetó a los dos años-: «Sé agradecido conmigo y con tus padres. ¡Soy Yo el fin de todo!

[31.15] Pero, si te insisten en que Me asocies aquello de que no tienes conocimiento, ¡no les obedezcas! En la vida de acá ¡pórtate amablemente con ellos! ¡Sigue el camino de quien vuelve a Mí arrepentido! Luego, volveréis a Mí y ya os informaré de lo que hacíais».

[31.16] «¡Hijito! Aunque se trate de algo del peso de un grano de mostaza y esté escondido en una roca, en los cielos o en la tierra, Alá lo sacará a luz. Alá es sutil, está bien informado.

[31.17] ¡Hijito! ¡Haz la azalá! ¡Ordena lo que está bien y prohíbe lo que está mal! ¡Ten paciencia ante la adversidad! ¡Eso sí que es dar muestras de resolución!

[31.18] ¡No pongas mala cara a la gente, ni pises la tierra con insolencia! Alá no ama a nadie que sea presumido, jactancioso.

[31.19] ¡Sé modesto en tus andares! ¡Habla en voz baja! ¡La voz más desagradable es, ciertamente, la del asno!»

[31.20] ¿No veis que Alá ha sujetado a vuestro servicio lo que está en los cielos y en la tierra, y os ha colmado de Sus gracias, visibles u ocultas? Pero hay algunos hombres que discuten de Alá sin tener conocimiento, ni dirección, ni Escritura luminosa.

[31.21] Y, cuando se les dice: «¡Seguid lo que Alá ha revelado!», dicen: «¡No, sino que seguiremos lo mismo que nuestros padres seguían!» ¿Y si el Demonio les llamara al castigo del fuego de la gehena?

[31.22] Quien se somete a Alá y hace el bien se ase del asidero más firme. El fin de todo es Alá.

[31.23] Si alguien no cree, ¡que su incredulidad no te entristezca! Volverán a Nosotros y ya les informaremos de lo que hacían. Alá sabe bien lo que encierran los pechos.

[31.24] Les dejaremos que gocen por breve tiempo. Luego, les arrastraremos a un duro castigo.

[31.25] Si les preguntas: «¿Quién ha creado los cielos y la tierra?», seguro que dicen: «¡Alá!» Di: «¡Alabado sea Alá!» No, la mayoría no saben.

[31.26] Es de Alá lo que está en los cielos y en la tierra. Alá es Quien Se basta a Sí mismo, el Digno de Alabanza.

[31.27] Si se hicieran cálamos de los árboles de la tierra, y se añadieran al mar, luego de él, otros siete mares más, no se agotarían las palabras de Alá. Alá es poderoso, sabio.

[31.28] Crearos y resucitaros cuesta a Alá tanto como si se tratara de una sola persona. Alá todo lo oye, todo lo ve.

[31.29] ¿No ves que Alá hace que la noche entre en el día y que el día entre en la noche, ha sujetado el sol y la luna, prosiguiendo los dos su curso hasta un término fijo, y que Alá está bien informado de lo que hacéis?

[31.30] Esto es así porque Alá es la Verdad, pero lo que ellos invocan en lugar de invocarle a Él es lo falso. Alá es el Altísimo, el Grande.

[31.31] ¿No ves que las naves navegan por la gracia de Alá, para que Él os muestre algunos de Sus signos? Ciertamente, hay en ello signos para todo aquél que tenga mucha paciencia, mucha gratitud.

[31.32] Y, cuando las olas les cubren cual pabellones, invocan a Alá rindiéndole culto sincero. Pero, en cuanto les salva, llevándolos a tierra firme, algunos de ellos vacilan. Nadie niega Nuestros signos sino todo aquél que es pérfido, desagradecido.

[31.33] ¡Hombres! ¡Temed a vuestro Señor y tened miedo de un día en que el padre no pueda satisfacer por su hijo, ni el hijo por su padre! ¡Lo que Alá promete es verdad! ¡Que la vida de acá no os engañe, y que el Engañador no os engañe acerca de Alá!

[31.34] Alá tiene conocimiento de la Hora. Envía abajo la lluvía. Sabe lo que encierran las entrañas de la madre, mientras que nadie sabe lo que el día siguiente le deparará, nadie sabe en qué tierra morirá. Alá es omnisciente, está bien informado.

 

AS SAJDAH

¡En el nombre de Alá, el Compasivo, el Misericordioso!

[32.1] 'lm.

[32.2] La revelación de la Escritura, exenta de dudas, procede del Señor del universo.

[32.3] O dicen: «Él la ha inventado». ¡No! es la Verdad venida de tu Señor, para que adviertas a un pueblo al que no ha venido monitor alguno antes de ti. Quizás, así, sean bien dirigidos.

[32.4] Alá es Quien ha creado los cielos, la tierra y lo que entre ellos está en seis días. Luego, se ha instalado en el Trono. Fuera de É1, no tenéis amigo ni intercesor. ¿Es que no os dejaréis amonestar?

[32.5] Él dispone en el cielo todo lo de la tierra. Luego, todo ascenderá a Él en un día equivalente en duración a mil años de los vuestros.

[32.6] Tal es el Conocedor de lo oculto y de lo patente, el Poderoso, el Misericordioso,

[32.7] Que ha hecho bien todo cuanto ha creado y ha comenzado la creación del hombre de arcilla

[32.8] -luego, ha establecido su descendencia de una gota de líquido vil-;

[32.9] luego, le ha dado forma armoniosa e infundido en él de Su Espíritu. Os ha dado el oído, la vista y el intelecto. ¡Qué poco agradecidos sois!

[32.10] Dicen: «Cuando nos hayamos perdido en la tierra, ¿es verdad que se nos creará de nuevo?» No, no creen en el encuentro de su Señor.

[32.11] Di: «El ángel de la muerte, encargado de vosotros, os llamara y, luego, seréis devueltos a vuestro Señor».

[32.12] Si pudieras ver a los pecadores, cabizbajos ante su Señor: «¡Señor! ¡Hemos visto y oído! ¡Haznos volver para que hagamos obras buenas! ¡Estamos convencidos!»

[32.13] Si hubiéramos querido, habríamos dirigido a cada uno. Pero se ha realizado Mi sentencia: «¡He de llenar la gehena de genios y de hombres, de todos ellos!»

[32.14] ¡Gustad, pues, por haber olvidado que os llegaría este día! Nosotros también os hemos olvidado. ¡Gustad el castigo eterno por lo que habéis hecho!

[32.15] Sólo creen en Nuestras aleyas quienes, al ser amonestados con ellas, caen al suelo en adoración y glorifican a su Señor, sin mostrarse altivos.

[32.16] Se alzan del lecho para invocar a su Señor con temor y anhelo y dan limosna de lo que les hemos proveído.

[32.17] Nadie sabe la alegría reservada a ellos en retribución a sus obras.

[32.18] ¿Es que el creyente es como el perverso? No son iguales.

[32.19] Quienes crean y obren bien tendrán los jardines de la Morada como alojamiento en premio a sus obras.

[32.20] Pero los que obren con perversidad tendrán el Fuego como morada. Siempre que quieran salir de él, serán devueltos a él y se les dirá:«¡Gustad el castigo del Fuego que desmentíais!»

[32.21] Hemos de darles a gustar del castigo de aquí abajo antes del castigo mayor. Quizás, así, se conviertan.

[32.22] ¿Hay alguien que sea más impío que quien, habiéndosele recordado los signos de su Señor, se desvía luego de ellos? Nos vengaremos de los pecadores.

[32.23] Hemos dado a Moisés la Escritura -no dudes, pues, en encontrarle- e hicimos de ella dirección para los Hijos de Israel.

[32.24] Elegimos de entre ellos a jefes que les dirigieran siguiendo Nuestra orden como premio por haber perseverado y por haber estado convencidos de Nuestros signos.

[32.25] Tu Señor fallará entre ellos el día de la Resurrección sobre aquello en que discrepaban.

[32.26] ¿Es que no les dice nada que hayamos hecho perecer a tantas generaciones precedentes, cuyas viviendas huellan ellos ahora? Ciertamente, hay en ello signos. ¿No oirán, pues?

[32.27] ¿Es que no ven cómo conducimos el agua a la tierra pelada y, gracias a ella, sacamos los cereales de que se alimentan sus rebaños y ellos mismos? ¿No verán, pues?

[32.28] Y dicen: «¿Para cuándo ese fallo, si es verdad lo que decís?»

[32.29] Di: «El día del fallo, la fe ya no aprovechará a los infieles y no les será dado esperar».

[32.30] ¡Apártate, pues, de ellos y espera! ¡Ellos esperan!

 

AL AHZAB

¡En el nombre de Alá, el Compasivo, el Misericordioso!

[33.1] ¡Profeta! ¡Teme a Alá y no obedezcas a los infieles y a los hipócritas! Alá es omnisciente, sabio.

[33.2] ¡Sigue lo que tu Señor te revela! Alá está bien informado de lo que hacéis.

[33.3] ¡Confía en Alá! ¡Alá basta como protector!

[33.4] Alá no ha puesto dos corazones en el pecho de ningún hombre. Ni ha hecho que las esposas que repudiáis por la fórmula: «¡Eres para mí como la espalda de mi madre!» sean vuestras madres. Ni ha hecho que vuestros hijos adoptivos sean vuestros propios hijos. Eso es lo que vuestras bocas dicen. Alá, empero, dice la verdad y conduce por el Camino.

[33.5] Llamadles por su padre. Es más equitativo ante Alá. Y, si no sabéis quién es su padre, que sean vuestros hermanos en religión y vuestros protegidos. No incurrís en culpa si en ello os equivocáis, pero sí si lo hacéis deliberadamente. Alá es indulgente, misericordioso.

[33.6] El Profeta está más cerca de los creyentes que ellos lo están de sí mismos. Las esposas de aquél son las madres de éstos. Los unidos por lazos de consanguinidad están más cerca unos de otros, según la Escritura de Alá, que los creyentes y los emigrados, a menos que hagáis un favor a vuestros amigos. Eso está anotado en la Escritura.

[33.7] Y cuando concertamos un pacto con los profetas, contigo, con Noé, con Abraham, con Moisés y con Jesús, hijo de María -pacto solemne,

[33.8] para pedir cuenta de su sinceridad a los sinceros. Y para los infieles ha preparado un castigo doloroso.

[33.9] ¡Creyentes! Recordad la gracia que Alá os dispensó cuando vinieron las legiones contra vosotros y Nosotros enviamos contra ellas un viento y legiones invisibles a vuestros ojos. Alá ve bien lo que hacéis.

[33.10] Cuando os acosaban por todas partes, cuando el terror os desvió la mirada, se os hizo un nudo en la garganta y conjeturasteis sobre Alá.

[33.11] En esa ocasión, los creyentes fueron puestos a prueba y sufrieron una violenta conmoción.

[33.12] Y cuando los hipócritas y los enfermos de corazón decían: «¡Alá y Su Enviado no han hecho sino engañarnos con sus. promesas!»

[33.13] Y cuando un grupo de ellos dijo: «¡Gente de Yatrib! ¡No os quedéis aquí! ¡Regresad!» Parte de ellos pidió autorización al Profeta, diciendo: «¡Nuestras casas están indefensas!» En realidad, no es que sus casa estuvieran indefensas, lo que querían era huir.

[33.14] Si les hubieran entrado por sus arrabales y se les hubiera pedido que apostataran, habrían aceptado casi sin demora.

[33.15] Pero habían concertado antes con Alá una alianza: no volver la espalda. Y hay que responder de la alianza con Alá...

[33.16] Di: «No sacaréis nada con huir si es que pretendéis con ello no morir o que no os maten. De todas maneras, se os va a dejar gozar sólo por poco tiempo».

[33.17] Di: «¿Quién podrá protegeros de Alá, tanto si quiere haceros mal como si quiere haceros objeto de misericordia?» No encontrarán, fuera de Alá, amigo ni auxiliar.

[33.18] Alá sabe quiénes son, entre vosotros, los que levantan obstáculos y los que dicen a sus hermanos: «¡Venid a nosotros!», pero sin mostrar gran ardor para combatir.

[33.19] Os regatean la ayuda. Cuando viene el miedo, les ves que te miran, girándoles los ojos, como mira aquél a quien ronda la muerte. Pero, cuando ha desaparecido el miedo, os hieren con sus afiladas lenguas, ávidos de botín. Esos tales no son creyentes. Alá hará vanas sus obras. Es cosa fácil t para Alá.

[33.20] Creen que los coalicionistas no se han ido. Pero, si los coalicionistas regresaran, querrían retirarse al desierto entre los beduinos, preguntando qué ha sido de vosotros. Si se quedaran con vosotros, combatirían pero poco.

[33.21] En el Enviado de Alá tenéis, ciertamente, un bello modelo para quien cuenta con Alá y con el último Día y que recuerda mucho a Alá.

[33.22] Y cuando los creyentes vieron a los coalicionistas, dijeron: «Esto es lo que Alá y su Enviado nos habían prometido. ¡Dios y su Enviado decían la verdad!» Esto no hizo sino aumentar su fe y su adhesión.

[33.23] Hubo creyentes que se mantuvieron fieles a la alianza concertada con Alá. Algunos de ellos dieron ya su vida. Otros esperan aún, sin mudar su actitud.

[33.24] Para que Alá retribuya a los sinceros por su sinceridad y castigue a los hipócritas, si quiere, o se vuelva a ellos. Alá es indulgente, misericordioso.

[33.25] Alá despidió a los infieles llenos de ira, sin que consiguieran triunfar. Alá evitó el combate a los creyentes. Alá es fuerte, poderoso.

[33.26] Hizo bajar de sus fortalezas a los de la gente de la Escritura que habían apoyado a aquéllos. Sembró el terror en sus corazones. A unos matasteis, a otros les hicisteis cautivos.

[33.27] Os ha dado en herencia su tierra, sus casas, sus bienes y un territorio que nunca habíais pisado. Alá es omnipotente.

[33.28] ¡Profeta! Di a tus esposas: «Si deseáis la vida de acá y su ornato, ¡venid, que os proveeré y os dejaré en libertad decorosamente!

[33.29] Pero, si buscáis a Alá, a Su Enviado y la Morada Postrera, entonces, Alá ha preparado una recompensa magnífica para aquéllas de vosotras que hagan el bien».

[33.30] ¡Mujeres del Profeta! A la que de vosotras sea culpable de deshonestidad manifiesta, se le doblará el castigo. Es cosa fácil para Alá.