LUQMAN
¡En el nombre de Alá, el Compasivo, el
Misericordioso!
[31.1] 'lm.
[31.2] Éstas son las aleyas de la
Escritura sabia,
[31.3]
[31.4] que hacen la azalá, dan el
azaque y están convencidos de la otra vida.
[31.5] Esos tales están dirigidos
por su Señor, ésos son los que prosperarán.
[31.6] Hay entre los hombres quien compra
historietas divertidas para, sin conocimiento, extraviar a otros
[31.7] Cuando se le recitan Nuestras aleyas,
se aleja altivamente, como si no las hubiera oído, como si hubiera
estado sordo. ¡Anúnciale un
castigo doloroso!
[31.8] Quienes, en cambio, hayan
creído y obrado bien tendrán los jardines de la Delicia.
[31.9] en los que estarán
eternamente. ¡Promesa de Alá
verdad! Él es el Poderoso, el Sabio.
[31.10] Ha creado los cielos sin pilares
visibles. Ha fijado en la tierra las
montañas para que ella y vosotros no vaciléis.
Ha diseminado por ella toda clase de bestias.
Hemos hecho bajar agua del cielo y crecer en ella toda especie generosa.
[31.11] Ésta es la creación
de Alá. ¡Mostradme, pues, qué han
creado los otros dioses que hay fuera de Él! Sí, los
impíos están evidentemente extraviados.
[31.12] Dimos a Luqmán la
sabiduría: «¡Sé agradecido con Alá! Quien es agradecido lo
es, en realidad, en provecho propio. Quien es
desagradecido... Alá Se basta a
Sí mismo, es digno de alabanza».
[31.13] Y cuando Luqmán
amonestó a su hijo, diciéndole: «¡Hijito! ¡No asocies a
Alá otros dioses, que la asociación es una impiedad enorme!».
[31.14] Hemos ordenado al hombre con
respecto a sus padres -su madre le llevó sufriendo pena tras pena y le
destetó a los dos años-: «Sé agradecido conmigo y con tus padres. ¡Soy Yo el fin de todo!
[31.15] Pero, si te insisten en que Me
asocies aquello de que no tienes conocimiento, ¡no les obedezcas! En la
vida de acá ¡pórtate amablemente con ellos! ¡Sigue el
camino de quien vuelve a Mí arrepentido! Luego, volveréis a Mí y
ya os informaré de lo que hacíais».
[31.16] «¡Hijito! Aunque se trate de
algo del peso de un grano de mostaza y esté escondido en una roca, en los
cielos o en la tierra, Alá lo sacará a luz. Alá es sutil, está bien informado.
[31.17] ¡Hijito! ¡Haz la
azalá! ¡Ordena lo que está bien y prohíbe lo que
está mal! ¡Ten paciencia ante la adversidad! ¡Eso sí
que es dar muestras de resolución!
[31.18] ¡No pongas mala cara a la
gente, ni pises la tierra con insolencia! Alá no ama a nadie que sea
presumido, jactancioso.
[31.19] ¡Sé modesto en tus andares!
¡Habla en voz baja! ¡La voz más desagradable es,
ciertamente, la del asno!»
[31.20] ¿No veis que Alá ha
sujetado a vuestro servicio lo que está en los cielos y en la tierra, y
os ha colmado de Sus gracias, visibles u ocultas? Pero hay algunos hombres que
discuten de Alá sin tener conocimiento, ni dirección, ni
Escritura luminosa.
[31.21] Y, cuando se les dice:
«¡Seguid lo que Alá ha revelado!», dicen: «¡No, sino que
seguiremos lo mismo que nuestros padres seguían!» ¿Y si el
Demonio les llamara al castigo del fuego de la gehena?
[31.22] Quien se somete a Alá y hace
el bien se ase del asidero más firme.
El fin de todo es Alá.
[31.23] Si alguien no cree, ¡que su
incredulidad no te entristezca! Volverán a Nosotros y ya les
informaremos de lo que hacían.
Alá sabe bien lo que encierran los pechos.
[31.24] Les dejaremos que gocen por breve
tiempo. Luego, les arrastraremos a un duro
castigo.
[31.25] Si les preguntas: «¿Quién ha
creado los cielos y la tierra?», seguro que dicen: «¡Alá!» Di:
«¡Alabado sea Alá!» No, la mayoría no saben.
[31.26] Es de Alá lo que está
en los cielos y en la tierra. Alá es
Quien Se basta a Sí mismo, el Digno de Alabanza.
[31.27] Si se hicieran cálamos de
los árboles de la tierra, y se añadieran al mar, luego de él,
otros siete mares más, no se agotarían las palabras de Alá. Alá es poderoso, sabio.
[31.28] Crearos y resucitaros cuesta a
Alá tanto como si se tratara de una sola persona.
Alá todo lo oye, todo lo ve.
[31.29] ¿No ves que Alá hace
que la noche entre en el día y que el día entre en la noche, ha sujetado
el sol y la luna, prosiguiendo los dos su curso hasta un término fijo, y que
Alá está bien informado de lo que hacéis?
[31.30] Esto es así porque
Alá es la Verdad, pero lo que ellos invocan en lugar de invocarle a
Él es lo falso. Alá es el
Altísimo, el Grande.
[31.31] ¿No ves que las naves
navegan por la gracia de Alá, para que Él os muestre algunos de
Sus signos? Ciertamente, hay en ello signos para todo aquél que tenga mucha
paciencia, mucha gratitud.
[31.32] Y, cuando las olas les cubren cual
pabellones, invocan a Alá rindiéndole culto sincero. Pero, en cuanto les salva, llevándolos a
tierra firme, algunos de ellos vacilan. Nadie
niega Nuestros signos sino todo aquél que es pérfido, desagradecido.
[31.33] ¡Hombres! ¡Temed a
vuestro Señor y tened miedo de un día en que el padre no pueda
satisfacer por su hijo, ni el hijo por su padre! ¡Lo que Alá
promete es verdad! ¡Que la vida de acá no os engañe, y que
el Engañador no os engañe acerca de Alá!
[31.34] Alá tiene conocimiento de la
Hora. Envía abajo la lluvía. Sabe lo que encierran las entrañas de la
madre, mientras que nadie sabe lo que el día siguiente le
deparará, nadie sabe en qué tierra morirá.
Alá es omnisciente, está bien informado.